- Mantén una buena higiene diaria
Sabemos que te lavas los dientes, pero… ¿lo haces de forma correcta? La duración media del cepillado está entre los dos minutos, ¡y no te olvides de cepillar /limpiar también tu lengua!
Usa hilo dental para eliminar los restos de alimentos que se quedan entre los dientes (¡principales causantes de las famosas caries interproximales) y termina tu rutina enjuagándote con locutorio. No dudes en pedir instrucciones a tu odontólogo/a de confianza sobre el uso del hilo, cepillos interproximales o sobre qué colutorio se adapta mejor a tus necesidades. No consiste en utilizar elementos complementarios porque sí, sino en la cantidad y calidad adecuadas.
- Elección del cepillo y renovación
Para mantener sana tu boca y llevar a cabo un buen cepillado, recuerda renovar tu cepillo (o el cabezal si se trata de un cepillo eléctrico) al menos cada tres meses y después de tu limpieza profesional en consulta.
También puedes hacerlo antes si notas que los “pelitos” de tu cepillo están muy “despeinados”. Aunque esto querrá decir que te cepillas con demasiada fuerza, que la técnica no es la correcta o que las cerdas del cepillo son demasiado blandas. Consultar estas dudas nunca está de más porque son de vital importancia para el paso fundamental de tu higiene bucal y prevención de patologías que es el cepillado dental.
- Revisión odontológica regular
Acude a tu dentista cada seis meses o un año para que realice una revisión completa de la salud de tu boca o sigue la pauta específica que haya diseñado para ti. Si tienes dudas sobre tu higiene diaria, por ejemplo, con la elección de pasta de diente o enjuague bucal, pídele consejo a tu dentista. Según tu sensibilidad dental y las características especiales de tu boca te convendrá una u otra.
Nunca debes esperar a que aparezca un dolor o molestia para acudir a tu odontólogo/a de confianza. Invertir en tu salud bucodental es la mejor decisión que puedes tomar, si tienes dudas al respecto puedes consultar otro de nuestros artículos aquí.
- No fumes
Los dientes de fumador son un problema estético, pero sobre todo también para tu salud bucodental ya que afecta directamente a los tejidos de soporte del diente. ¿Sabías que el tabaco puede producir o afectar en enfermedades como la halitosis, la melanosis del fumador, periodontitis y pérdida dental?
- No abuses de bebidas carbonatadas
Las bebidas con gas, carbonatadas y azucaradas tienen un gran porcentaje de azúcar, ácido fosfórico, y ácido cítrico. Estos componentes, aunque menos conocidos que el azúcar, también ocasionan problemas en los dientes como la incidencia de caries o el desgaste y la erosión del esmalte dental. De hecho, el consumo habitual de refrescos multiplica por tres la aparición de caries en los dientes.
En el caso de los niños y los adolescentes este riesgo se agrava.
- Cuida tus hábitos alimenticios
La boca es una parte más de tu cuerpo, por lo que no debería extrañarte que una mala alimentación afecte a su salud. Si dejamos de proporcionar nutrientes suficientes a nuestro organismo, los tejidos de nuestra boca serán más vulnerables ante una infección, algo que puede afectar a las encías y a la pérdida de dientes en adultos.
Además, es importante beber una buena cantidad de agua al día y mantener una dieta variada y saludable.
Si leyendo este artículo te ha surgido alguna duda sobre cómo mantener una boca sana, ¡contáctanos y te ayudaremos a despejarlas!